"Las Aventuras de Pepito, Pelota y Pelotilla en el Valle del Encanto"
En esta Bohemia tuvimos el gusto de contar con la presencia del escritor David Ernesto Panamá, quien vino a compartir con nosotros la experiencia de escribir este libro, que como él mismo dice "Es para los niños y sus padres".
Pepito, Pelota y Pelotilla son amigos y compañeros de estudios. Aprenden diligentemente, bajo la tutoría de Kyoto, tanto historia como artes marciales, respetan el medio ambiente, huyen de la violencia y se defienden cuando es necesario. Han aprendido a preocuparse por los demás y a defender lo que creen justo. Así son estos chiquillos que respetan a sus mayores y que comparten estrechos lazos de cariño. Pero también son inquietos, alegres y juguetones y todo esto se combina para darle agilidad y emoción al relato.
Un poco al estilo de las mangas japonesas, los héroes de estas aventuras cuentan con armas súper poderosas y una inteligencia superior, que usan exclusivamente para ayudar a los demás.
David nos cuenta que se animó a publicar este libro por la insistencia de sus hijas mayores, ya que cuando eran chicas, y viajaban de San Salvador a Santa Ana, las entretenía en el trayecto contándoles historias improvisadas de estos héroes.
La lectura es sencilla y el libro tiene una hermosa portada con un cuadro regalo de Aleph, pintor nacional, así como algunas ilustraciones interiores.
"Este libro pretende recuperar el goce de la lectura en familia, que los padres compartan con sus hijos un momento del día para conocerse, para enterarse de la vida de los jóvenes, yo por ejemplo, hay días en los que ya no veo a ninguna de mis hijas porque cada una de ellas está metida en su cuarto con la computadora, con el Ipod o con el DVD. Es por eso que volver a la costumbre de relatar historias a los niños es tan importante"
David también nos cuenta que este no será un título aislado, sino más bien el primero de una saga de historias que llevarán a los pequeños lectores a mundos nuevos, desconocidos y llenos de emociones.
No queremos terminar esta Bohemia sin dejar constancia de nuestras palabras de apoyo para la poeta Susana Reyes quien ha tenido la triste experiencia de decir adiós a su hermano mayor, ¡estamos contigo Susy!.
Tampoco irnos sin contarles que hemos iniciado la primera campaña de recolección de libros para la fundación de bibliotecas en pueblos de nuestro país, este primer esfuerzo va encaminado fundar la biblioteca de la Casa de la Cultura de Nueva Esparta en el departamento de la Unión. Y ha sido hermoso realmente porque a mi llamado se hay unido amigos verdaderos, no sólo míos, sino de la poesía y de la literatura, que me han ofrecido tanto sus libros como ayuda en la recolección de los mismos, entre estos queridos seres que tengo el honor y la fortuna de conocer están: Fundación Metáfora, especialmente Raquel Cañas que siempre entusiasta es la primera en voluntariarse, Otoniel Guevara, poeta querido con quien cuento sin necesidad de preguntar, María Cristina Orantes, hermana de Poesía y Más, Carmen González Huguet, tan buena amiga como poeta, Carlitos Clará de fundación Alkimia, Korina Bruni, siempre incondicional cuando de apoyar a la poesía se trata, el Maestro Roberto Huezo, mi querido poeta y amigo André Cruchaga, primero en contestar a esta convocatoria, Rene Chacón, siempre viendo cómo ayuda, Carlos Ayala, director de YSUCA, quien me ha demostrado todos estos años su gran calidad humana, su corazón generoso y su gran amistad, a los chicos de YSUCA y Alguien como vos, que también apoyan esta campaña, y a todos ustedes que este martes llamaron a LA BOHEMIA y ofrecieron su ayuda, a todos ustedes mi abrazo, mi beso y mi gratitud... Sepan que como recompensa tendrán a más de un niño con su libro entre las manos.
¡GRACIAS!
En esta Bohemia tuvimos el gusto de contar con la presencia del escritor David Ernesto Panamá, quien vino a compartir con nosotros la experiencia de escribir este libro, que como él mismo dice "Es para los niños y sus padres".
Pepito, Pelota y Pelotilla son amigos y compañeros de estudios. Aprenden diligentemente, bajo la tutoría de Kyoto, tanto historia como artes marciales, respetan el medio ambiente, huyen de la violencia y se defienden cuando es necesario. Han aprendido a preocuparse por los demás y a defender lo que creen justo. Así son estos chiquillos que respetan a sus mayores y que comparten estrechos lazos de cariño. Pero también son inquietos, alegres y juguetones y todo esto se combina para darle agilidad y emoción al relato.
Un poco al estilo de las mangas japonesas, los héroes de estas aventuras cuentan con armas súper poderosas y una inteligencia superior, que usan exclusivamente para ayudar a los demás.
David nos cuenta que se animó a publicar este libro por la insistencia de sus hijas mayores, ya que cuando eran chicas, y viajaban de San Salvador a Santa Ana, las entretenía en el trayecto contándoles historias improvisadas de estos héroes.
La lectura es sencilla y el libro tiene una hermosa portada con un cuadro regalo de Aleph, pintor nacional, así como algunas ilustraciones interiores.
"Este libro pretende recuperar el goce de la lectura en familia, que los padres compartan con sus hijos un momento del día para conocerse, para enterarse de la vida de los jóvenes, yo por ejemplo, hay días en los que ya no veo a ninguna de mis hijas porque cada una de ellas está metida en su cuarto con la computadora, con el Ipod o con el DVD. Es por eso que volver a la costumbre de relatar historias a los niños es tan importante"
David también nos cuenta que este no será un título aislado, sino más bien el primero de una saga de historias que llevarán a los pequeños lectores a mundos nuevos, desconocidos y llenos de emociones.
No queremos terminar esta Bohemia sin dejar constancia de nuestras palabras de apoyo para la poeta Susana Reyes quien ha tenido la triste experiencia de decir adiós a su hermano mayor, ¡estamos contigo Susy!.
Tampoco irnos sin contarles que hemos iniciado la primera campaña de recolección de libros para la fundación de bibliotecas en pueblos de nuestro país, este primer esfuerzo va encaminado fundar la biblioteca de la Casa de la Cultura de Nueva Esparta en el departamento de la Unión. Y ha sido hermoso realmente porque a mi llamado se hay unido amigos verdaderos, no sólo míos, sino de la poesía y de la literatura, que me han ofrecido tanto sus libros como ayuda en la recolección de los mismos, entre estos queridos seres que tengo el honor y la fortuna de conocer están: Fundación Metáfora, especialmente Raquel Cañas que siempre entusiasta es la primera en voluntariarse, Otoniel Guevara, poeta querido con quien cuento sin necesidad de preguntar, María Cristina Orantes, hermana de Poesía y Más, Carmen González Huguet, tan buena amiga como poeta, Carlitos Clará de fundación Alkimia, Korina Bruni, siempre incondicional cuando de apoyar a la poesía se trata, el Maestro Roberto Huezo, mi querido poeta y amigo André Cruchaga, primero en contestar a esta convocatoria, Rene Chacón, siempre viendo cómo ayuda, Carlos Ayala, director de YSUCA, quien me ha demostrado todos estos años su gran calidad humana, su corazón generoso y su gran amistad, a los chicos de YSUCA y Alguien como vos, que también apoyan esta campaña, y a todos ustedes que este martes llamaron a LA BOHEMIA y ofrecieron su ayuda, a todos ustedes mi abrazo, mi beso y mi gratitud... Sepan que como recompensa tendrán a más de un niño con su libro entre las manos.
¡GRACIAS!
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